Instalaciones domóticas: el Palacio de Caprotti de Ávila
- En este artículo, hablamos del Palacio de Caprotti de Ávila, de su instalación domótica y de las posibilidades de la tecnología Z-Wave en usos terciarios
El Palacio de Superunda de Ávila, más conocido hoy en día como Palacio de Caprotti, es un edificio del siglo XVI de dos plantas principales con dos torreones en las esquinas y una pequeña tercera planta superior. Cuenta con un patio de columnas unido con la segunda planta por una imponente escalera que da acceso a grandes salones decorados con tapices.
Este histórico edificio perfectamente conservado fue la casa mansión y el estudio del pintor italiano Guido Caprotti, hasta su cesión al Ayuntamiento de Ávila en el año 2006.
Tras un proceso de reforma del edificio que ha durado en total unos siete años, el Palacio se ha convertido en el Museo Guido Caprotti. Entre las 106 obras que alberga, destacan, además de las del pintor italiano, dos cuadros de Joaquín Sorolla, miniaturas de Laura de la Torre, esposa de Caprotti, y varias esculturas de su hijo Óscar Caprotti.
Si os cuento todo esto, en primer lugar es porque tanto el palacio en sí como la historia de este pintor italiano y su vinculación con la ciudad de Ávila, merecen una mención especial y es una parada obligada para cualquier visitante. Pero como ya podéis intuir por el título de este artículo, este palacio abulense es también muy interesante por la instalación domótica con la que cuenta y que próximamente será ampliada ofreciendo mayores funcionalidades.
Hace algunas semanas, Domótica Doméstica tuvo la suerte de poder realizar una visita técnica de este edificio durante un día entero. Fue una experiencia enriquecedora y extremadamente instructiva en cuanto al potencial de la domótica en general y de la tecnología Z-Wave en particular.
No vamos a hablar aquí, por razones obvias, de los múltiples sistemas de seguridad que incorpora este magnífico edificio que alberga verdaderos tesoros artísticos. Lo que nos interesa en este caso es relatar cómo las soluciones domóticas de las que disponemos hoy en día, incluso si están más enfocadas al uso doméstico, dan tanto de sí que pueden cubrir, en algunos casos, usos terciarios.
En el caso concreto del Palacio de Caprotti, esta instalación domótica ha venido a completar los sistemas de seguridad y el circuito cerrado de TV ya instalados, para añadir funcionalidades complementarias muy interesantes, sin interferir en esos sistemas, lo que me ha llevado a reafirmarme en la idea que expresaba recientemente como éste, especialmente tratándose de un uso terciario.
El sistema domótico del Palacio Caprotti, basado en un centro de control Vera 3, permite aprovechar las cámaras de seguridad con un enfoque más domótico, sin interferir en el sistema de seguridad, como os comentaba, e incorporar además detectores de movimiento y otros multisensores para optimizar el uso de los recursos, mejorando al mismo tiempo la experiencia del visitante.
Este sistema domótico posibilita, entre otras muchas funcionalidades, encender las luces de las distintas salas cuando se detecta la presencia de un visitante en una zona concreta, además de monitorizar parámetros importantes, como los valores de temperatura, humedad y luminosidad.
Lo realmente interesante de esta instalación son dos cosas a mi juicio, más allá de lo que puede aportar una solución como ésta en un museo.
Primero, nos permite comprobar que las soluciones de domótica doméstica que tiene a su alcance hoy el gran público tienen mucho recorrido y pueden, en algunos casos, ser instaladas en otro tipo de edificios en condiciones adecuadas. En este caso concreto, un servidor domótico Vera 3 llevado al límite de sus posibilidades, es capaz de gestionar simultáneamente decenas de cámaras y módulos Z-Wave de distintos tipos.
En segundo lugar, ni que decir tiene que en un edificio de más de 2.500 metros cuadrados y varias plantas como éste, una solución domótica inalámbrica tiene que estar basada en una red mallada, como es el protocolo Z-Wave, porque de lo contrario es imposible que el servidor domótico cubra todo el edificio por sí solo.
En un escenario como éste, es pues imprescindible hacer un diseño previo de la instalación domótica para situar de forma estratégica módulos Z-Wave que hagan las veces de nodo de conexión en cada sala, consiguiendo así un mallado perfecto y una cobertura de gran calidad. Y en este punto concreto, lo que hemos podido comprobar in situ es que los módulos ocultos de Fibaro, como éste, son excelentes repetidores de señal. Eso es una lección que deberíamos aprender todos los que intentamos construir un sistema domótico de calidad en nuestros hogares.
Si tenéis oportunidad de visitar esta preciosa ciudad de Ávila, no dejéis de acercaros al Palacio de Caprotti, por la belleza del edificio, por su historia, por las tesoros artísticos que alberga, y también por el magnífico trabajo de reforma realizado, en el que la domótica ocupa un lugar destacado.
Magnífica entrada, en todos los sentidos, dan muchas ganas de visitar ese palacio para ver todo lo que cuentas aquí, y de paso, hacer una visita a esa magnífica ciudad castellana.
Y también enhorabuena por todo, por el post, y por el magnífico proyecto domótico que se vislumbra aquí, tan sólo con echar un vistazo. A quién le guste el tema, sin duda, aquí tiene un montón de información y conocimientos reunidos… 🙂
El palacio está genial Begoña, además la ubicación dentro de la muralla cercana a la plaza le hace un lugar de interés.
Con respecto a la instalación domótica está muy bien, con muchas cosas que mejorar, pero donde aprendimos mucho con cada prueba de controlador o cada prueba de módulo.
Gracias Bego por pasarte.
Gracias Bego. A ti ese palacio te gustaría mucho, estoy seguro, empezando por el edificio en sí y por la colección de arte. Si vas a Ávila, no te lo pierdas 😉