El servidor domótico VeraLite lleva ya un tiempo largo en el mercado. Se podría decir incluso que es un controlador veterano. Eso hace que su interfaz parezca antigua comparada con la de los sistemas más recientes y novedosos, como es el caso de los controladores Fibaro.
Pero esa veteranía no se traduce únicamente en una desventaja frente a la competencia, muy al contrario. Si por algo destacan especialmente los controladores Vera, es sin duda por la inmensa cantidad de plugins que se les puede instalar y que les dotan de funcionalidades complementarias sumamente interesantes. Tanto es así que no son pocas las personas que se decantan por una VeraLite antes que por un Home Center Lite de Fibaro, por ejemplo, porque esos plugins les garantizan una gran compatibilidad entre su sistema domótico y otros dispositivos y tecnologías.
Existe más de un centenar de plugins “oficiales” para los controladores Vera. Los hay de todo tipo, para muchísimos dispositivos y tecnologías, y son gratuitos en su inmensa mayoría por no decir en su totalidad. Permiten integran en un servidor domótico Vera dispositivos que no son Z-Wave y/o servicios de todo tipo, consiguiendo de esta manera controlar e interactuar desde nuestro sistema domótico con un gran abanico de “objetos conectados”, servicios, tecnologías y funcionalidades. No podría citarlos aquí todos, evidentemente, pero así a bote pronto se me ocurre mencionar como ejemplo el plugin que permite integrar una estación meteorológica NetAtmo, el plugin para los enchufes Wemo de Belkin, plugins de geolocalización de nuestros dispositivos móviles, notificaciones, cámaras IP, sistemas de riego y de alarma… y muchísimos más.
Estos plugins se encuentran en la tienda de aplicaciones de Vera, llamada Mios Marketplace, y también en la propia interfaz de los controles Vera.
Instalación de plugins en VeraLite
Instalar un plugin en un servidor domótico Vera es sumamente sencillo, como vamos a ver a continuación.
En primer lugar, debemos abrir la interfaz web de nuestro controlador Vera y dirigirnos a las pestañas Apps/Install Apps, como podemos ver en la siguiente captura.
En esa pantalla, vemos como aparecen todos los plugins disponibles. Los podemos clasificar por categorías con uno de los menús desplegables de la parte superior de la pantalla, o hacer una búsqueda para encontrar lo que buscamos más fácilmente.
Una vez que sabemos qué plugin queremos instalar, basta con pulsar el botón “Install” de color azul situado a la derecha de la descripción del plugin. Empieza entonces el proceso de instalación automático, que no suele tardar más de unos breves instantes.
Y ya está, eso es todo. Una vez instalado, nuestro nuevo plugin aparecerá en la lista de plugins que hemos implementado en nuestro controlador y que podemos consultar en cualquier momento en las pestañas Apps/My Apps de la interfaz.
Vemos que a la derecha de cada plugin instalado en nuestro sistema, tenemos un botón de color mostaza llamado “Uninstall”, que permite, como su propio nombre indica, desinstalar en cualquier momento los plugins que queramos. El proceso de desinstalación en tan sencillo como el de instalación.
Veamos ahora qué impacto tiene la instalación de plugins en la pestaña de la interfaz que nos permite ver todos los dispositivos instalados en nuestro servidor domótico. Para ello nos dirigiremos a las pestañas Devices/All.
Los plugins, al igual que los dispositivos Z-Wave, cuando se instalan no están asignados a ninguna habitación de nuestro sistema. Podemos hacer esa asignación justo después del procedimiento de inclusión de un módulo nuevo o a posteriori. Es incluso posible cambiar un dispositivo de una habitación a otra en cualquier momento y con un simple clic. En el caso de los plugins, es exactamente lo mismo. Justo después de instalarlos, aparecen en la categoría “No room” pero luego nosotros los podemos asignar a otras habitaciones, a nuestro antojo.
Idea para la clasificación de los plugins en nuestro sistema domótico
Ocurre que cuando instalamos un plugin, en ocasiones vemos que después de la instalación aparecen varios dispositivos nuevos en nuestro sistema domótico. El el caso, por ejemplo, del plugin que sirve para controlar desde nuestro servidor Vera los enchufes Wemo de Belkin, que no son dispositivos Z-Wave, como vimos recientemente en este análisis.
Ese plugin nos instala un dispositivo genérico que aparece con el logotipo del producto (que vemos en la captura de pantalla anterior) y luego otro dispositivo que no es otra cosa que un interruptor con dos posiciones, ON y OFF (que aparece en la siguiente captura).
Es evidente que este segundo dispositivo es muy importante, esencial diría yo, ya que es el que nos va a permitir encender y apagar la luz o cualquier otro aparato que esté conectado a nuestro Wemo, pulsando ON/OFF o incluyéndolo en cualquier escena domótica que se nos ocurra. Por lo tanto y por lógica, lo normal es asignar este interruptor Wemo a la habitación de nuestra casa en la que se encuentra realmente.
Pero el primer dispositivo genérico Wemo es también muy importante ya que es el que controla realmente el interruptor. No podremos prescindir de él ni eliminarlo si queremos que todo funcione como debe. Debe estar ahí aunque nosotros no podremos hacer nada con el ya que no tiene botones, aunque si unas opciones de configuración que deberemos usar la primera vez para configurar nuestro Wemo correctamente con su IP, etc.
Como os decía antes, esos dispositivos genéricos no son poco frecuentes y son totalmente necesarios, por lo que no los podremos eliminar. Por ello, para clasificar de alguna forma estos dispositivos genéricos que, una vez configurados, poquísimas veces volveremos a tocar, a mi se me ha ocurrido crear una habitación adicional en mi servidor domótico, que he llamado “Almacén Z-Wave”. La idea es asignar a esa “habitación” todos estos dispositivos genéricos que aparentemente no sirven para nada, pero que no podemos eliminar. De esta forma los tendremos bien clasificados y no nos molestarán ya que asignar esos dispositivos a una habitación real, no me parece muy operativo ni útil y entorpece mucho a la hora de interactuar con nuestro sistema domótico tanto desde la interfaz Web como desde una aplicación móvil.
Como veis, es sumamente sencillo instalar y desinstalar en nuestra VeraLite esos plugins, que son sin duda la gran baza de los servidores domóticos de la marca Vera. Si quieres hacerte con un Vera Lite, tan sólo tienes que pulsar sobre este enlace y en pocas horas lo tendrás en tu casa.